¿Cómo influye el peso en la fertilidad y el embarazo?

Existen muchos factores relacionados con el estilo de vida que pueden afectar a la consecución del embarazo y al desarrollo de este. En este artículo os explicaremos cómo pueden influir el bajo peso y la obesidad en la fertilidad y la gestación.

¿Cómo afecta la obesidad?

En los últimos años, los casos de obesidad (IMC superior a 30) están aumentando entre las mujeres en edad reproductiva, por lo que no es de extrañar que también esté creciendo el interés en conocer cuáles son los efectos de esta en la fertilidad y el embarazo.

Numerosos estudios han relacionado la obesidad con alteraciones en la menstruación, infertilidad, abortos y complicaciones obstétricas. En muchas ocasiones, la infertilidad es consecuencia de que presentan la función ovárica alterada. De hecho, muchas de las pacientes con el síndrome del ovario poliquístico presentan obesidad o sobrepeso. En otros casos, se debe a que las alteraciones metabólicas de estas pacientes afectan al crecimiento folicular, al desarrollo embrionario y a la implantación.
Incluso en aquellas mujeres que se someten a tratamientos de reproducción asistida, se obtienen peores resultados si se trata de pacientes obesas. Además, responden peor a las gonadotropinas que se administran durante la estimulación ovárica. Esto hace que, en general, sean necesarias dosis más altas de estas hormonas, que el tratamiento se alargue más y se obtenga un número menor de óvulos.
Se observan peores resultados si comparamos los resultados clínicos de las pacientes obesas con las que presentan normopeso en los siguientes puntos :

• Mayores tasas de cancelación de ciclo.
• Disminución de las tasas de implantación embrionaria debido a que se encuentra alterada la receptividad endometrial y la calidad de los óvulos es peor.
• Peores tasas de gestación clínica.
• Aumento de las tasas de aborto, tanto bioquímicos como clínicos.
• Aumento de la frecuencia de complicaciones gestacionales (diabetes gestacional, preeclampsia, parto pretérmino…).
• Riesgo aumentado de defectos congénitos.

Todos estos efectos negativos tienen como resultado que la tasa de recién nacido vivo también sea inferior en las pacientes obesas.
Es importante destacar que la obesidad también afecta negativamente en los hombres, ya que en algunos estudios se ha visto que la calidad seminal está alterada: la concentración y morfología espermáticas son peores. Además, presentan con más frecuencia disfunción eréctil.

Por tanto, si ambos miembros de la pareja presentan obesidad, será todavía más difícil lograr la gestación.

¿El peso bajo también puede influir?

En las mujeres que presentan peso bajo (IMC inferior a 18.5) también se observan alteraciones que pueden afectar negativamente a la fertilidad y al embarazo. En este caso, también es frecuente que exista una disfunción ovárica, sobre todo en las mujeres que tienen un ICM inferior a 17. Además, también se encuentra aumentado el riesgo de que el embarazo sea pretérmino.

Recomendaciones para conseguir el embarazo evolutivo

Como hemos visto, tener el peso adecuado a la hora de buscar ser padres es fundamental para lograr un bebé sano. Por suerte, en la mayoría de los casos, los efectos negativos que hemos comentado son reversibles si se tratan a tiempo.
La principal indicación para estas pacientes es seguir una dieta acorde a su objetivo, ya sea perder o ganar peso. En el caso de las mujeres obesas, también será recomendable realizar más ejercicio físico.
También hay que tener en cuenta que el normopeso debería conseguirse antes de ponerse a buscar el embarazo, ya que lo ideal es que en el momento en el que se consiga no haya más cambios metabólicos.
Otro punto importante es que es recomendable que un especialista haga un seguimiento del caso para adecuar la dieta, ya que tampoco será positivo para lograr la gestación que los cambios de peso sean muy bruscos.
En este artículo te contamos algunos consejos relacionados con la dieta y el embarazo: ¿Existe alguna dieta para conseguir quedarse embarazada?