¿Cómo se realiza y cuáles son los riesgos de una punción folicular?

La punción folicular es un procedimiento muy habitual y seguro en el ámbito de la fecundación asistida. Pero ¿por qué es necesario? ¿cómo se hace exactamente? y, sobre todo, ¿sentiré dolor? En este post contestamos a las dudas más recurrentes sobre la punción folicular. Además, te explicamos todas sus fases porque tú también tienes un papel importante para un buen resultado.

¿Qué es una punción folicular?

Una punción folicular es una parte del proceso de fecundación in vitro (FIV). Corresponde a la fase de extracción de los óvulos.
En una FIV, de hecho, se pueden definir varias fases:

• Estimulación de la ovulación.
• Extracción de los óvulos mediante punción folicular.

• Fecundación de los óvulos.
• Cultivo de los embriones y la transferencia.

¿Cuándo se hace la punción folicular?

Ante todo, lo normal es que para realizar una punción folicular la paciente se someta a un proceso de estimulación de la ovulación previa. De este modo, se garantiza una mayor recolección de óvulos y aumentan así las opciones de gestación.

1. La estimulación inicia a partir de la regla. Un equipo especializado actuará inhibiendo el ciclo propio de la paciente y administrando hormonas para recolectar más folículos.
2. Los folículos son unos sacos rellenos de líquido que se encuentran en los ovarios y que contienen los óvulos. La ovulación es inducida cuando los folículos alcanzan el tamaño adecuado. Este control se realizará mediante ecografías vaginales.
3. Para desencadenar la maduración final de los óvulos se inyectará una hormona que provoca la ovulación. Unas horas antes de que se produzca la ovulación, la rotura del folículo, se programará la punción folicular.

Esta última fase del proceso es crítica ya que si se realiza un par de horas después ya no podremos recuperar los óvulos.

¿Cómo se hace la punción folicular?

En este procedimiento es muy que haya una correcta actuación y coordinación entre la paciente y el equipo médico. Cada uno tendrá respetar las indicaciones recomendadas:

La paciente

Debe presentarse en ayunas, no haber ingerido ni comida ni bebida durante las 6h precedentes a la punción. Debe someterse a una suave sedación que no requiere intubación. Durante el procedimiento permanecerá dormida y no sentirá dolor.

El anestesista

Procura que la paciente se sienta cómoda y no perciba molestias ni dolor durante el procedimiento. Si hay pocos folículos, la punción se podría hacer sin anestesia a petición de la paciente.

El ginecólogo

El especialista, con ayuda de un transductor ecográfico, por vía vaginal accede a puncionar los folículos. El contenido de estos folículos pasa a unos tubos precalentados a través de un sistema de aspiración controlado por el mismo ginecólogo.

El equipo de enfermería

Se encarga de controlar el proceso de aspiración asistiendo al ginecólogo y a la paciente durante todo el procedimiento.

El laboratorio

El embriólogo recibe estos tubos en el laboratorio e identifica los óvulos que se encuentran flotando en el líquido folicular. Al finalizar, informa al ginecólogo y a la paciente del número de ovocitos recuperados.
Hay que tener en cuenta que no de todos los folículos se obtienen ovocitos ni todos los ovocitos obtenidos son maduros.
La estimulación se para cuando la mayoría de los folículos son maduros, pero siempre se aspiran folículos pequeños de los que no se obtienen ovocitos o éstos son inmaduros.

¿Cuánto dura una punción folicular?

La duración de una punción folicular depende en gran medida del número de folículos a aspirar. Pero, por lo general, no suele durar más de 5-10 minutos.

Reposo y recuperación tras la punción folicular

Es recomendable que el día de la punción se guarde reposo para evitar efectos secundarios de la anestesia.
Si la respuesta folicular ha sido muy elevada, los días posteriores a la punción pueden aparecer molestias. Ante cualquier duda, te sugerimos que consultes tu ginecólogo si aparecen molestias más persistentes.

Riesgos de la punción folicular

Los principales riesgos de la punción folicular vienen determinados por la estimulación. La complicación más común es el llamado síndrome de hiperestimulación.
Si la respuesta ovárica a la estimulación ha sido elevada, siempre pueden quedar folículos pequeños que no haya sido posible aspirar. Estos pueden producir malestar y retención de líquidos.
También, pueden producirse sangrados por punción de pequeños vasos sanguíneos que requieran una mayor recuperación.
Por evidentes motivos, es importante que la punción folicular sea realizada por personal con experiencia. Además, los controles para garantizar una completa recuperación tienen que ser rigurosos.
Si tienes preguntas más específicas acerca de la punción folicular y deseas conocer la opinión de nuestro equipo médico especializado, no dudes en contactarnos. ¡Estamos a tu disposición!